Según datos proporcionados por la INEGI, en México el 99.8% de los negocios son pequeñas o medianas empresas (PYMES), su importancia es tanta que generan el 72% del empleo y producen el 52% del Producto Interno Bruto (PIB).
A pesar de esto en los últimos años se han visto aterrorizadas por la etapa financiera en la que vivimos, y para el 2017 puede ser peor.
Por lo que se necesita implementar ideas que no necesariamente son nuevas pero que no se practican diariamente.
Primero, comprar lo hecho en México.
Se necesita privilegiar los productos o servicios nacionales sobre todo cuando su calidad lo justifica. Que no se pierdan de vista las propiedades.
Pagar a tiempo.
Aunque esto suene extraño, gran parte de los socios con los que se colabora son igualmente PYMES, que dependen del pago para seguir produciendo.
El tercer y último consejo se dirige directamente a las emprendedores.
Es necesario buscar alternativas de ahorro, y no necesariamente en los ingredientes del producto o en la eficiencia de los servicios que son los que venden. Puede adquirirse una oficina virtual en lugar de una física y desarrollar estrategias de ventas y marketing en línea para cautivar nuevos prospectos.